Entra en un aula de la universidad un nuevo profesor.
- Buenos días a todos, me voy a presentar: Soy Florián de Lys Caicedo, su nuevo catedrático de Matemáticas de la Lógica. Ustedes se estarán preguntando que qué diantre de asignatura es ésta, y se lo voy a explicar con un ejemplo para que les quede claro. Primero les doy unos datos sobre mi persona y ustedes deberán aplicar una ecuación para averiguar la respuesta.
Adopta un tono de voz solemne y se dirige a la sala abarrotada de alumnos.
- Vivo en Vilanova y la Geltrú, en un chalé de 1.500 m2 . Tengo dos hijos que estudian en la facultad de sociología de la Sorbona. Mi mujer es profesora de estilismo. Mi coche es un Porsche Cayenne y el de mi mujer un BMW descapotable. Veraneamos en el balneario de Baden Baden. En mi casa hay tres equipos de música de la marca Bang&Oluffsen. .. etc.
Detiene el discurso, se estira la chaqueta y vuelve a dirigirse a la sala.
- Con estos datos ¿Alguien sabría aplicar una ecuación para saber cuántos años tengo?
Tras un silencio sepulcral, se oye al fondo de la sala una voz muy alta:
- ¡CUARENTA Y CUATRO!
El profesor, sorprendido, invita al alumno a que razone el resultado.
- ¡Efectivamente! , por favor salga a la pizarra y explíquenos qué procedimiento ha utilizado para averiguar mi edad.
Desde la última fila del aula se desplaza un alumno, con pinta de friky, y llega hasta la pizarra.
- A ver, joven, explíquenos su procedimiento.
El alumno carraspea, se aclara la voz y dice:
- ¡Es que tengo un amigo que es medio gilipollas y sólo tiene veintidós!